Siempre he sido un gran aficionado a la lectura, pero hubo una época, durante mi adolescencia, que deje aparcada esta afición, al menos a lo que se refiere a leer libros, porque cómics sí que leía.
El tema es que no encontraba libros que me atrajeran lo suficiente como para dedicarles tiempo. Eso cambio un día de verano en el que estando en casa de un amigo vi que en su librería tenían la novela “Cabal” de Clive Barker. Como la adaptación cinematográfica de dicha novela, que se estrenó con el título de “Razas de noche”, me había gustado mucho le pedí que me dejara la novela. Mi amigo accedió sorprendido, ya que sabía que yo no leía libros con asiduidad.
Devoré la novela en dos días, ayudó a hacerlo en tan poco tiempo el estar de vacaciones y la poca extensión del libro, y quedé con ganas de más. Le pedí consejo a mi amigo que conociendo mi pasión por el cine de terror me hizo la obvia recomendación de leer a Stephen King. Yo le pedí que me recomendara un par o tres de títulos pero a ser posible de no muchas páginas. Él me recomendó “El umbral de la noche”, que si bien supera las 400 páginas, al ser una recopilación de relatos cortos se me haría amena su lectura. Y vaya si se me hizo amena.
“El umbral de la noche” fue publicada originalmente en 1978. Está formado por 20 relatos cortos. Normalmente las recopilaciones de relatos tienden a tener altibajos, ya que puedes pasar de leer un buen cuento a uno pésimo para acto seguido leer una joya y después uno aburrido. Con “El umbral de la noche” esto no pasa, ya que la mayoría de relatos son de una gran calidad, por no decir directamente que son una obra maestra o mejor catalogarlos, para que captéis mi grado de fascinación, como una jodida maravilla.
De entre los 20 relatos que se incluyen dejadme destacar, por diferentes motivos, unos cuantos:
El último turno.
Un grupo de empleados de una fábrica de materiales es enviado a limpiar las bodegas del edificio. Allí tendrán problemas con las ratas. Esos problemas se irán acrecentando a medida que van descendiendo las plantas de la bodega ya que las ratas se comportan cada vez de manera más extraña.
“El último turno” es un relato de mucha tensión, no recomendable para todo aquel que sienta animadversión por las ratas.
Tuvo una adaptación cinematográfica con el título de “La fosa común”.
La trituradora.
Historia un tanto absurda sobre una maquina de planchar que cobra vida tras catar la sangre de una chica. Se dedicara a matar para seguir obteniendo sangre.
También tuvo adaptación al cine, creo que aún inédita en España, a manos de Tobe Hooper.
El coco.
De los mejores relatos de la compilación.
Un hombre le cuenta a su psiquiatra que es el responsable de la muerte de sus 3 hijos, aunque no los ha asesinado él, pero que no les creyó cuando le dijeron que el coco se escondía en el armario de su habitación y uno a uno los fue matando.
¡Ojo con el final! De los que no se olvidan.
Campo de batalla.
Divertidísimo relato que nos cuenta la historia de un hombre que recibe un paquete que contiene soldados de juguete. Estos cobran vida y el protagonista tendrá que luchar contra ellos para lograr salvar su vida.
Camiones.
Un grupo de personas están atrapadas en una gasolinera sin posibilidad de escape, ya que los camiones han cobrado vida y van a por ellos. La duda es, ¿han cobrado vida solo los camiones o todas las maquinas?
Este relato ha tenido 2 adaptaciones a la gran pantalla. La primera de ellas dirigida por el propio King en su único trabajo como director.
A veces vuelven.
Un profesor llega a una nueva escuela. Allí descubrirá con asombro que entre sus alumnos están los responsables del asesinato de su hermano 20 años atrás.
Historia de terror sobrenatural que a mí personalmente me encantó, sobre todo por cierto sacrificio que tiene que hacer el protagonista para hacer frente a los asesinos.
También tuvo su correspondiente adaptación cinematográfica.
La cornisa.
Soberbio relato.
Un hombre que vive una tórrida relación con la mujer de un mafioso sufre un chantaje a manos de este como venganza: Le ha llenado el maletero del coche de cocaína y la única manera de que no llame a la policía es que de toda la vuelta al edificio en el que están caminando por la cornisa que está a más de 200 metros de altura.
De esos relatos que consiguen ponerte al borde del ataque de corazón.
Fue adaptado como uno de los relatos que formaban la película de episodios “Los ojos del gato”.
El hombre de la cortadora de césped.
Divertido relato sobre un hombre que contrata a una empresa para que le corten el césped. El trabajador que manda la empresa para realizar dicho trabajo tiene una manera muy curiosa, pero efectiva, de desempeñar su oficio.
La película “El cortador de césped” supuestamente adaptaba el relato pero Stephen King amenazó con acudir a los tribunales si promocionaban al film haciendo referencia a esto, ya que relato y film no se parecen en nada.
Basta S.A.
Otro relato formidable.
Un hombre que desea dejar de fumar acude a Basta S.A. una empresa que ayuda a las personas que quieren dejar ese vicio. Una vez contrata sus servicios comprobará que esta empresa utiliza métodos muy expeditivos para lograr ese propósito.
Stephen King destaca muchas veces por lo cruel que es con sus personajes y este relato es un buen ejemplo.
Al igual que “La cornisa”, fue adaptado al cine como parte del film de episodios “Los ojos del gato”.
Los chicos del maíz.
Muy buen relato.
Una pareja conduce su coche por una carretera rodeada de maizales. Una discusión hace que se distraigan un momento y atropellen accidentalmente a un chico que muere en el acto. Tras meterlo en el maletero conducen hasta el primer pueblo que encuentran. Allí descubrirán que no hay ningún adulto, ya que todos han sido asesinados los niños que rinden un extraño culto al maíz. La pareja tendrá un triste final ya que será sacrificada al Dios al que adoran los niños.
Hubo una película homónima que lo adaptaba.
Un trago de despedida.
Este divertido relato retoma al pueblo de Jerusalem’s Lot como protagonista. Recomendable para todos aquellos que disfrutaron con la lectura de “El misterio de Salem’s Lot”.
Podría seguir hablando del resto de relatos pero estos son los que a mí personalmente más me quedaron grabados, aunque eso no quiere decir que sean los mejores.
No sé si sois muy aficionados a la lectura. Si lo sois y aún no habéis leído “El umbral de la noche” permitidme que os recomiende encarecidamente que lo hagáis.
Si sois de los que os cuesta leer, creo que este libro os puede agradar. Si os lo aconsejo es por el mismo motivo que me lo aconsejo a mí mi amigo: El estar formado por relatos cortos que no tienen que ver el uno con el otro, facilita su lectura.
Después de leer este libro, me lancé sobre todo lo que se puso a mi alcance de Stephen King. Y tras descubrí a otros autores de literatura de terror. Y desde entonces ya no he dejado de leer, tanto terror como otros géneros.
“El umbral de la noche” es uno de los libros que he leído en mi vida que recuerdo con más estima. Para mí es una obra maestra. ¿Es la mejor recopilación de relatos cortos de terror? Siempre creí que sí, hasta que leí “Libros sangrientos” de Clive Barker.
Pero eso ya es otra historia. Quizá os la cuente algún día.
