Los cromo tapones

¿Qué tal viejales? ¿Cómo ha ido la semana? ¿Alguna dolencia nueva? Bueno, desde Retro Memories esperamos que siguáis manteniendo bajo control los niveles de azúcar y colesterol.

Hoy os queremos hacer recordar aquellos pequeños tesoros de plástico que, hace decenios, podíamos encontrar en los tapones metálicos de las botellas de litro de refresco. Sí amados viejunos, lo de las botellas de Coca-Cola, Pepsi o Kas de dos litros con tapón de plástico es un invento bastante moderno, lo que nosotros consumíamos era mucho más artesanal, a parte, la botella era de vidrio, con lo que, una vez más, vivíamos al límite ya que una mala rotura nos podía provocar una hemorragia fatal en cualquier despiste. ¿No recordáis ir al tendero de turno a devolver los envases ya que si no te clavaban un extra por una botella nueva?

Pues bien, durante un tiempo, Coca-Cola, Fanta y otras variedades incluyeron una especie de plástico transparente en la parte interior de los tapones que incluían una dibujo relacionado con algún tema:

Cromo-tapón de Superman

Se hicieron varias colecciones. La más, a nuestro parecer, espectacular fue la colección de Superman. Constaba de 35 cromo-tapones que se podían coleccionar en un álbum diseñado para tal fin:

La portada del álbum de la primera película de 1978
Interior del álbum

Esta colección es tremendamente difícil de encontrar hoy en día y las veces que se ve a la venta el precio que alcanza es elevadísimo. Para que os hagáis una idea, un solo cromo-tapón de Superman puede tener un valor de entre 13 a 18€. Imaginaos un lote con los 35 más el álbum original. Si un día encontráis alguno en un cajón lleno de polvo de vuestra casa paterna guardadlo como un tesoro.

Posteriormente se sacó una segunda colección de 53 cromos con las aventuras de la segunda película de Superman:

Portada del segundo álbum
Interior del álbum

Esta colección es aún más rara de ver hoy en día y se ha convertido en una rareza que es uno de los mayores objetos de deseo de los coleccionistas.

Otra rareza fue la colección de Coca-Cola con la historia de los juegos olímpicos que se sacó por la celebración de la edición de Montreal de 1976. Se incorporó una novedad y es que los cromos eran transparentes. Con esto y un visor de cartón que regalaban, bautizado como «VISORAMA», podías ver a contraluz las «transparecias-cromo» (algo así como el HD actual). El «visorama» te era entregado en forma de un cartón recortable que tu mismo tenías que montar. Cuenta la leyenda que entre los que acabaron la colección se sortearon proyectores de transparencias que te permitían proyectar los cromo-tapón aumentados en la pared o una pantalla. No tenemos constancia de la existencia real del proyector ni de nadie que lo llegase a tener.

Portada del álbum de Montreal 76
Interior del álbum, éste constaba de 84 cromos.
El visorama tal y como te lo daban con las instrucciones de montaje
El visorama a punto para ser montado
El visorama montado

Esta colección es más fácil de encontrar completa, incluso con el visorama, y su precio no es desorbitado. Podéis ver un ejemplo aquí.

Hubieron otras colecciones como la de personajes de Disney, y todas, creo que nos emocionaban a todos cuando encontrábamos un cromo en el reverso de un tapón. Ahora bien, lo que también recuerdo perfectamente es el final que tuvieron la mayoría de cromo-tapones que poseí: totalmente borrados, solo quedó el plástico. ¿Porqué? Pues porque me dedicaba a tenerlos en la boca compulsivamente  y los tintes con los que estaban hechos no eran a prueba de la acidez de la saliva. Recuerdo que yo no era el único, y seguro que más de un susto hubo por conato de asfixia gracias a algún cromo-tapón que se coló demasiado profundo en la laringe de alguien.

¿Tuvisteis cromo-tapones queridos ancianos? ¿Los recordáis? ¿Conserváis alguno de los álbumes en vuestra habitación del asilo? Yo por desgracia no conservo ninguno físicamente, pero mi maltrecha memoria aún me permite recordarlos como uno de los objetos más importantes de mi niñez… en el siglo pasado, hace ya demasiadas décadas.

Para acabar un par de imágenes más, una donde veremos un cromo-tapón que servia para un sorteo de vete a saber qué (¿quizá el proyector?) Y otra donde veremos como los traductores de películas y productos audiovisuales nos han maltratado desde siempre.

Un sorteo de otro tiempo, sin e-mail ni twitter
¿Luisa Lane?!?! ¿Porqué no directamente «Luisa Camino»? Que fuerte.

Tomad la medicación viejunos…